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Jardines y parques urbanos de España

Las ciudades más verdes de España son Madrid, Vitoria, León, Pamplona, Sevilla, Logroño, Valladolid, Santander, Lleida y Zaragoza. Hablamos en términos relativos. Son verdes poniendo en relación el número de habitantes y los espacios ajardinados y parques urbanos destinados al esparcimiento y solaz de sus moradores.

Madrid también figura en el top-10 de las principales megaurbes verdes del mundo junto a Viena, Múnich, Berlín, Sao Paulo, Manchester, Lisboa, Ámsterdam, Washington y la ciudad-estado de Singapur.

La historia de la jardinería en España tiene sus principales hitos en el estilo romano, islámico, italiano, francés, inglés y las vanguardias artísticas del siglo XX. Todos esas formas de entender la estética verde han dejado su impronta en los jardines del amplio abanico de espacios ajardinados y parques urbanos de la piel de toro continental e isleña.

España se caracteriza por una climatología seca donde los rayos de sol son su elemento estelar. Por ello, en sus inicios la jardinería optó por acondicionar espacios pequeños y cerrados que permitieran sistemas de riego y mantenimiento fáciles de llevar a cabo.

La vegetación española puede dividirse en cuatro grandes campos: mediterránea, eurosiberiana, atlántica y canaria.

En tiempos más recientes los jardines buscaron acomodo en expresiones temáticas y especializadas, proliferando los botánicos, espacios con una personalidad bien definida entre la conservación, la investigación, el museo y la divulgación didáctica.

Podemos hablar a vuelapluma de cinco tipos o modelos precursores:

El jardín romano era puramente ornamental y muy estético, añadiendo arcos y columnas para crear ambientes evocadores.

Los jardines islámicos, con notables influencias persas y egipcias, buscaban recrear el paraíso del más allá en la vida cotidiana.

Por su parte, el jardín de corte cristiano invitaba a la meditación. Sus materializaciones más sobresalientes se dieron en monasterios y abadías.

Por lo que se refiere al jardín italiano y francés, su nota destacada descansaba en la composición geométrica perfecta, en la armonía del trazado escupulosamente delineado en la mente de sus autores. Incluían detalles o caprichos para romper la monotonía de las líneas ideales basadas en la razón humana.

Los siglos XVI y XVII vivieron un impulso de proyectos de la realeza y de la aristocracia de sangre. Los monarcas y reinas se decantaron por los espacios públicos para tener contento al pueblo llano, mientras los nobles y las gentes de alcurnia acometieron proyectos privados de gran ostentación dentro de sus villas, palacios y palacetes.

En esta época, el jardín pretendía cristalizar un diálogo fructífero entre el Renacimiento y el Barroco.

Ya en el siglo XVIII, sobre todo tras el grito desgarrado de la Revolución Francesa, el gusto se hizo más austero y mercantil con recuerdos de China y Japón. Era la expresión de la estética dominante de la pujante clase burguesa, que también quiso dejar su sello personal en los espacios ajardinados.

El siglo XIX significó la renovación del gusto y la estética en todos los ámbitos de la vida y el arte. Los tres protagonistas absolutos fueron la emoción, el sentimiento y la exaltación pasional de la Naturaleza. Fueron los tiempos del Romanticismo a flor de piel.

En el sigo XX se solaparon varias tendencias: historicismo, revival de formas clásicas o tradicionales, el modernismo, el eclecticismo... Surgieron nuevos diseños innovadores que ansiaban aunar la filigrana y simbolismo del arte con el vitalismo desbordante de la Naturaleza.

Y en este recorrido veloz alcanzamos el parque urbano, casi siempre de titularidad municipal: el jardín acotado o lineal, ocupando grandes extensiones, que emerge como un pulmón verde asediado por los rascacielos, los atascos de coches, las prisas de la posmodernidad y el afán de soledad entre tanto ruido y algarabía ciudadana.

Los parques urbanos se han convertido en el lugar ideal para huir del mundanal caos de la experiencia cotidiana. Ese lugar donde el hombre y la mujer de nuestro tiempo puede hablar consigo mismo/a.

Aquí tienes una selección exquisita de jardines y parques urbanos de España para que vayas donde vayas puedas darte un paseo tranquilo por la vida de cada día.

Cientos de jardines esperan tu visita. ¿Vienes?

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